es el proceso mediante el cual se solucionan los problemas o fallos en el mecanismo de una cerradura para asegurar su funcionamiento adecuado. Esto puede incluir la reparación de cerraduras atascadas, la sustitución de piezas desgastadas, la corrección de problemas con las llaves o el cilindro, o la restauración de cerraduras dañadas por intentos de robo o desgaste general.
Los cerrajeros especializados utilizan herramientas específicas para reparar las cerraduras sin necesidad de reemplazarlas completamente, ofreciendo una solución más económica y prolongando la vida útil del sistema de cierre.